El archiconocido «carré» de la firma francesa de lujo Hermés es, probablemente, el pañuelo de seda más conocido y estiloso del mundo de la moda.

Diseñado en 1937, originalmente como un complemento masculino, a lo largo de los años se ha convertido en un sinónimo de clase y exclusividad, y en uno de los accesorios más cotizados por las mujeres. Su primer modelo llevó el nombre de Jeu des Omnibus et Dames Blanches, fue creado en los talleres del artesano Marcel Gandit en Lyon y el estampado retrataba un juego de sociedad de la época.

carre hermes

hermes carre firma lujo accesorios moda pañuelo seda

Desde entonces más de 100 diseñadores anónimos y reconocidos han realizado más de 1500 diseños diferentes de esta icónica prenda, a un ritmo de unos 20 modelos por semestre. Se le llama «carré», «cuadrado» en francés, precisamente porque ésa es su forma: 90×90 centímetros de seda o cachemir con un nombre y una historia propios (aunque Hermés también realiza ediciones con otras dimensiones).

hermes moda

hermes carre campaña

Con una costosa realización artesanal que va desde Brasil hasta Lyon, cada carré es un testimonio del trabajo de decenas de personas y una prenda casi única. La empresa familiar Perrin recoge la seda de productores locales brasileños, la tratan y la tejen (para cada pañuelo son necesarios unos 300 capullos, de los que se extraerán 45o kilómetros de hilo de seda seleccionado y desgomado) , y con este género abastece a Hermés: rollos de entre 100 y 150 metros de longitud de seda de primera calidad.

pañuelo carre seda hermes

carre hermes accesorio cinturon pañuelo seda

En Francia se realiza el proceso de grabado: se divide el diseño sobre el papel de los pañuelos y se determina cuántas tonalidades, y por consiguiente de planchas (que se fabricarán específicamente para cada pañuelo), serán necesarias para la impresión.

Este proceso es muy largo y trabajoso, y conlleva días enteros de dedicación (alrededor de 500 horas para los diseños más sencillos, con unos 30 colores; hasta 2.000  para los más complejos, de 45 tonos).

hermes carre campaña moda

carre hermes moda accesorios pañuelo

Después, esos colores se son creados en el laboratorio propio de Hermés. La firma dispone de más de 750.000 tonalidades, entre los que los coloristas escogen y que combinan para crear las vibrantes paletas cromáticas de los carrés. A continuación, en los talleres A.S. de Lyon (los únicos de todo el mundo equipados con tres máquinas de impresión que suman alrededor de 150 metros de largo) los rollos de seda son impresos con las planchas de color.

Los colores han de ser fijados mediante temperaturas superiores a los 100ºC, y los rollos se lavan, secan y cortan. El último paso, fundamental, es la costura a la francesa: también a mano y siguiendo la técnica del roulotté,  los bordes se enrollan y cosen hacia afuera con hilo también de seda y del mismo color.

carre hermes moda

coco rocha anuncio carre hermes

En total, un proceso que lleva dos años de trabajo y puede implicar hasta 800 personas. Recientemente, la marca ha realizado una serie de estrategias para continuar promocionando este producto y poniendo de manifiesto su versatilidad: el año pasado crearon la app para iPhone Silk Knot, en la que recogían los numerosos modos de llevar uno de estos pañuelos: en la cabeza, en el cuello, a modo de cinturón, en el bolso, como camiseta, falda o vestido…

hermes carre seda pañuelo

carre hermes pañuelo seda

hermes carre moda

Y recientemente organizaron la Maison des Carrés en Barcelona, una pop-up store que de forma efímera dio una ubicación física a su tienda online, especializada en esta mítica prenda y que durante el mes de mayo albergó un espacio onírico en el que se ensalzaba en todo su esplendor este pañuelo, referente de una de las firmas más reconocidas de la moda por su componente artesanal, su exclusividad y su elegancia.

maison des carres hermes barcelona

maison des carres barcelona hermes

pop up store hermes barcelona maison des carres

Aunque no puede decirse que su precio sea reducido, lo cierto es que para tratarse de un icono de moda y una prenda exclusiva su coste medio de 33o euros (para las ediciones más sencillas) está al alcance de una buena parte de fashionistas, que gracias a este objeto de deseo versátil y autónomo pueden contagiarse de la sofisticación más clásica.

Imágenes: dansvogue, revistagq, lamaisondescarres, readmeinpictures, spottedfasion, harper’s bazaar